martes, 24 de mayo de 2011

Un chal grande y calentito

En el sitio donde trabajaba antes pasaba mucho frío, en invierno aquello era un auténtico congelador, así que decidí hacerme un chal tupidito para ponérmelo en los hombros y pasar mejor el invierno. Todavía no lo he acabado, la verdad, el diseño inicial se amplió, cambió y ha resultado más grande de lo que esperaba.

Al principio iba a tener un diseño de rayas en tres colores, verdes, blancas y rosas, en ese orden. Hice el primer bloque de tres y pensé en añadirle un detalle de rayas más finas intercaladas, para que no fuera tan soso. Al hacer la primera raya, vi que el rosa y el verde juntos no quedaban tan bien, hacían poco contraste entre ellos, sobre todo estando el blanco de por medio, así que le añadí otro trozo blanco grande y después las rayas finas.

Cuando llegaba más o menos a la mitad, pensé que podía hacer el chal simétrico repitiendo lo tejido pero en sentido contrario. El resultado es muy bonito, pero cuando ya tenía un buen trozo de la segunda mitad, me he dado cuenta de que el chal es ENORME!!. Cortado antes de hacer el último bloque de rayas grandes, tendría el tamaño ideal, pero aunque pudiera parecer original y distinto si lo hubiera dejado así, la realidad es que tenía aspecto de inacabado, se notaba mucho.

Ahora ya solo me quedan tres de las rayas grandes, y lo voy haciendo poco a poco. Me imagino que durante el verano lo habré acabado y podré enseñaros el resultado completo. De momento lo único que puedo enseñar es ésta foto, en la que os podéis hacer una idea de cómo son los bloques de los que os hablo.




El diseño del chal es mío (los colores y la distribución) pero el punto lo saqué de un libro de muestras de puntos que me compré hace tiempo “Modelos de Punto” de Mary Webb. Es un punto bastante básico, pero muy bonito, queda un poco rugosito y le da algo de textura al chal. Es adaptable a cualquier prenda, lleva un número de puntos múltiplo de 9 + 2 y los puntos de borde que le queráis poner (yo le puse 3 a cada lado). Se tejen 4 vueltas iguales todo el rato:

Vuelta 1: (lado derecho) Puntos de borde *2 puntos derecho, 2 puntos revés, 3 puntos derecho, 2 puntos revés* repetir desde * hasta que os queden 2 puntos más los puntos de borde, tejedlo todo al derecho.
Vuelta 2: (lado revés) Todas las vueltas del revés se tejen a punto revés.
Vuelta 3: (lado derecho) Puntos de borde * 2 puntos derecho, 7 puntos revés* repetir desde * hasta que os queden 2 puntos más los puntos de borde, tejedlo todo al derecho.
Vuelta 4: (lado revés) Punto revés.


Así se verá el tejido haciendo las 4 vueltas.

Yo lo he hecho de la siguiente manera, con agujas del 3 y lana finita he montado 260 puntos. Para medir cuanto quería que tuviera cada bloque he contado las rayas que se forman con el punto revés en el diseño (haciendo las 4 vueltas), y cada tira grande tiene 15 rayas (15 repeticiones de las 4 vueltas), las tiras pequeñas solo tienen dos.

Se puede hacer en cualquier color y en cualquier grosor de lana, y es calentito y muy cómodo. Además como al final ha salido tan grande, lo puedo usar también de manta. Me va a venir fantástico en invierno!!!!

jueves, 19 de mayo de 2011

Agujas Knit Pro intercambiables

YA ESTÁN AQUÍ!! YA HAN LLEGADO!! Por fin tengo mis agujas Knit pro intercambiables!!.

Mi cumpleaños es el día 24 y le pedí a mi novio que me comprara estas agujas porque, sinceramente, estoy harta de las agujas circulares de los chinos. Al principio me hacían mucho apaño, estaban lo suficientemente bien como para tejer y no me daban problemas. Últimamente ya se me han roto 3 de las que tenía, sin poder arreglarlas, y me han dejado con labores a medias, un desastre. Además me he cansado de que los cables tengan forma, se enrollen y sean demasiado grandes, ¡todavía no he podido hacer un gorro en condiciones!.

Lo bueno de estas es que con 6 medidas y 5 cables tengo 30 agujas diferentes, de buena calidad y muy cómodas. Los cables no han cogido forma aunque vinieran enrollados, y el pedido ha llegado en seguida desde la tienda de Tira del ovillo, donde también tienen lanas y otras cosas útiles para comprar.

He pedido cables de 40, 60, 80, 100 y 120 centímetros, y agujas del 3, 4, 4’5, 5, 6 y 7, las medidas que más uso. Además, cada cable viene con dos topes para poder dejar la labor en suspenso si lo necesitas, y una llave para que te ayude a apretarlo bien y que no se abra mientras estás tejiendo. Yo misma me he regalado una bolsita para guardarlo todo, así lo tengo todo en el mismo sitio.

Ahora por fin podré terminar las bolsas para bolsas de basura que les iba a regalar a mis amigas y el gorrito que intenté tejer con la técnica del Magic Loop y no me salió muy bien, se daba de sí por culpa del cable y tampoco se dejaba tejer.




Aquí os dejo un vídeo que explica la técnica del Magic Loop para las que no la conozcais, y cuando ya haya probado las agujas os cuento!!!!

lunes, 16 de mayo de 2011

Lo quiero hacer todo... y no se puede

Es lo malo de estar montando una casa, que vives en dos sitios a la vez y tienes que tener labores en todas partes, porque es imposible soltar las agujas cuando eres tejedora compulsiva.

El fondo de la operación lo he tocado este fin de semana... (Entiéndase fondo como ¿es posible que alguna vez dejes de empezar cosas y acabes algo?). El caso es que mi novio y yo hemos pasado la noche del viernes en casa de mis padres, que no estaban. La única labor empezada que tengo ahora mismo en casa es la manta que le estoy haciendo, así que no la podía sacar para tejer. Intenté estar un rato sin coger las agujas, mi novio me puso a jugar a la consola, pero mis dedos amenazaban con ponerse a ejercer de agujas con lo primero que pillara, así que empecé otra cosa.

Lo nuevo empezado no es ni más ni menos que una bufanda… ancha, tejida en punto vainilla y con dos hebras, azul y gris claro, muy bonita, y un proyecto largamente pensado. El caso es que el proyecto se quedó en el montaje y las 4 primeras rondas… ni al punto vainilla he llegado todavía y ahí se va a quedar sabe Dios hasta cuándo.

En mi casa, donde todavía no vivo en realidad, tengo mi gigantesca mantachal, maravillosa, calentita y sin terminar, pero casi y el comienzo de un cojín que quería hacer para el sofá. Está claro que ante la ausencia de novio, en casa de mis padres me dedicaré sólo a la manta que le quiero regalar, así que el nuevo proyecto no se acabará en los próximos meses.

A veces me paro a pensar en estas cosas y miro a las demás tejedoras, como mis amigas del Foro de Guía para tejer bien, que constantemente nos están enseñando esos proyectos tan bonitos que hacen y me miro a mi, con 80 cosas empezadas y sin acabar ninguna. Incluso mi madre, que normalmente no teje, se ha acabado una manta en cosa de un mes, y si ha tardado más es porque se ha ido quedando sin lana!!! Esto no le puede pasar a una tejedora compulsiva…

He tomado una decisión, hoy os prometo desde aquí que esta tejedora compulsiva va a acabar sus labores para poder enseñarlas al mundo. Se acabó empezar cosas para no acabarlas, tenemos que darle uso a esas agujas que se quedaron encalladas en proyectos antiguos y ponernos las cosas tan bonitas que vamos a hacer. Lo voy a cumplir, no sé cuanto tardaré, porque la limpieza y adecuación del piso me están dejando sin tiempo para tejer tanto como antes, pero Lo Conseguiré!!

PD: no se me olvida que os debo la clase magistral sobre Jacquard que me dio mi abuela, si soy capaz de explicarme debidamente.


PD2: he pedido para mi cumpleaños unas Knitpro intercambiables, espero que me lleguen hoy o mañana como muy tarde, pero no voy a empezar nada nuevo para probarlas, lo prometo!!

jueves, 12 de mayo de 2011

He vuelto, y mi abuela también.

Despues de muchos meses sin publicar en el blog debido a asuntos personales, he encontrado el momento para volver con vosotras. Echaba de menos escribir en el blog, y en el tiempo en el que no he podido hacerlo he tenido experiencias nuevas, he cambiado muchas cosas y también he aprendido.

La verdad es que la idea de volver me lleva rondando desde el día de la madre. En España cae el primer domingo de mayo, que este año casualmente fue el día 1. Ese día mis abuelos vinieron a comer a casa y le enseñé a mi abuela la manta nueva que estoy haciendo, porque la de cuadros no me fué muy bien. Os cuento primero esa historia.

La manta de cuadros y la manta de cuadros II

Todas las tejedoras expertas saben, o habrán comprobado que hay veces que la tensión cambia con el tiempo. A veces estás tejiendo con la misma lana y las mismas agujas, y los puntos no salen igual. En principio no es un problema, porque se puede adaptar la tensión actual a la muestra de tejido que estés haciendo, cambiar de agujas, y diversos truquillos para remediarlo, siempre que no te pase durante un mismo tejido.

El problema viene cuando te pasa como a mí, que estás haciendo una manta a base de diversos cuadros, y de repente, tejiendo con la misma lana y agujas, los cuadros empezaron a ensanchar hasta unos 5 cm más que los anteriores. Me frustré, me enfadé, grité un poco y decidí que no me estaba cundiendo nada, así que cambié completamente de idea y ahora estoy haciendo otra manta completamente diferente.

Alguna a lo mejor se está preguntando ¿Y por qué la manta de cuadros II? pues porque casualmente la manta nueva también es de cuadros, aunque con otro diseño completamente diferente a la primera. La vi hace tiempo en una web, y cuando pensé en cambiar de manta, lo primero que pensé fue en esa. Es una manta muy bonita, de dos colores, a punto bobo (todo del derecho) que se teje en tiras largas que luego se cosen. Lo saqué del blog La bufanda de Lana (gracias desde aquí a mi inspiradora) y va muy rápido. En poco más de un mes he hecho mucho más que en varios meses de tejer cuadrados, así que espero que me de tiempo a regalarsela a mi novio pronto.

El regreso de mi abuela

Estoy empezando a pensar que debería cambiar el nombre del blog por algo así como "Mi abuela teje, y yo me copio". El caso es que el día de la madre le enseñé mi manta nueva, que le gustó mucho más que lo que estaba haciendo antes y no me puso pegas, pero me hizo un comentario de lo más interesante.

Al parecer, una prima suya le comentó una vez, mientras me hacía una chaqueta a mí cuando era pequeña, que el Punto bobo, o Punto musgo (que se teje todo al derecho) se estira y se da de sí mucho menos si en vez de hacer las vueltas al derecho, se hacen todas del revés.

Es evidente que no lo he probado todavía, pero lo intentaré. Si alguna de vosotras lo ha comprobado, que nos lo cuente.

PD: Me alegro mucho de volver, espero que me perdoneis todo éste tiempo de ausencia.
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